No podemos influir las condiciones meteorológicas, pero podemos asegurarnos de que no limiten nuestro rendimiento. El tiempo puede cambiar de un día para otro y pasar de ser soleado y caluroso a frío y lluvioso. Además, es necesario protegerse de los peligros intrínsecos a cada trabajo (fuego, combustibles, agentes químicos, sangre, líquidos corporales, etc.). La mejor defensa es un sistema de prendas formado por elementos específicos que proporcionen una protección y un confort duraderos.
Vestuario
El vestuario que llevamos puesto afecta al rendimiento en nuestro trabajo. Para asegurar el confort y tener el cuerpo seco, el vestuario debe proteger del viento y el agua, así como de otros líquidos. Además, debe facilitar la evacuación del sudor en forma de vapor de agua para evitar los efectos del estrés térmico. De lo contrario, puede perderse la concentración en la tarea que se está realizando, ya que entre los efectos del estrés térmico se encuentra la desorientación y la perdida de capacidad para interpretar de forma correcta la realidad.
Las prendas, el calzado y los guantes deben ofrecer un buen ajuste y complementar el resto del equipo. Por ejemplo, la chaqueta debe ser resistente a la abrasión para soportar la fricción de las tiras de una mochila pesada, los guantes deben ofrecer la destreza necesaria para manipular el equipo con facilidad y, el calzado, debe ser ligero para no mermar la resiliencia del usuario.
Gorras y gorros
Es importante protegerse la cabeza para evitar enfriarse. La cabeza puede liberar más calor del que produce el cuerpo; por eso es esencial cubrirla de forma adecuada. Además de proteger de la lluvia y la nieve, una gorra o un gorro deben facilitar la evacuación del sudor para mantener la cabeza seca.
Guantes
Las manos pueden llegar a sudar mucho y, cuando hace frío,se ralentiza la circulación sanguínea. Por eso es necesario llevar unos guantes que atrapen el calor, faciliten la disipación del sudor y eviten a su vez la entrada de agua. Además, los guantes no deben limitar la capacidad de trabajo. Si es necesario quitarse los guantes para utilizar una herramienta o un arma, entonces no son los guantes apropiados para esa labor.
Además de no reducir la destreza, los guantes deben proporcionar el nivel adecuado de estabilidad térmica, resistencia a la abrasión y protección frente a la entrada de líquidos. También debe tenerse en cuenta la importancia en algunos casos de incluir un acolchado adicional en la palma y los dedos.